lunes, 29 de abril de 2024

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   Malos tiempos para la l铆rica resultan esos que viven aquellos que deciden no seguir al abanderado; para quienes optan por el verso suelto o la prosa incisiva frente al pensamiento 煤nico barnizado con tintes de libertad. Desde hace tiempo asistimos, primero con cierta incredulidad y visto el empe帽o de quienes llevan adelante su proyecto demencial, aquella ha mutado en cruda realidad que como una gota malaya ha traspasado la cubierta de seguridad, alcanzando de lleno a todo el organismo que cre铆amos a salvo, al menos en su n煤cleo, de cualquier intento de entronizar a un mes铆as, de asentar las bases de un complejo sistema donde cualquier atisbo de raz贸n es considerado un peligro.

M谩s all谩 de la Selecci贸n Natural. Del lamarckismo biol贸gico al lamarckismo social. (H Cyberpress Editorial, 2023). Jos茅 Mar铆a Ayaso y David Crespo.

   Antes de entrar en materia, es imprescindible que destaque el esfuerzos de estos dos escritores, de estos dos hombres, que han elaborado una hip贸tesis digna de tener en cuenta y que esboza «otra forma de entender la evoluci贸n de las sociedades» y donde la colaboraci贸n sea el centro de nuestro desarrollo social. Tanto Ayaso como Crespo, han ahondado, en un texto breve pero intenso, en la necesidad de pensar, de aunar fuerzas en torno a qui茅nes somos; de ir m谩s all谩 de la an茅cdota que atesoran algunos sobres de az煤car. Son una rara avis a tener en cuenta.

   En el transcurso de nuestra evoluci贸n la especie humana se ha ido autoimponiendo una serie de normas -tab煤es- que han ido conformando nuestra forma de ser, que han embridado (o si se prefiere, han metido en cintura la parte animal que nos caracteriza). Ha sido una empresa colosal cimentada a base de aciertos y errores: Nuestra clave para el mejor aprendizaje y as铆 ir avanzando como especie. En tal sentido, los autores recuerdan que la «Ilustraci贸n desvincul贸 la evoluci贸n del ser humano de la existencia de los mitos y las creencias», para a帽adir seguidamente que tambi茅n «promovi贸 la tolerancia religiosa y cultural». Pero no se puede obviar que en Occidente se est谩 expandiendo un elemento perturbador, el Islam, que hace peligrar nuestro modo de vida y cuyo fin no es otro que socavar los cimientos de todo aquello que hemos asumido como se帽a de identidad. Y en el caso que nos ocupa, la misma existencia de la Naci贸n.

Y es ah铆, donde a trav茅s de las p谩ginas de M谩s all谩..., a este lector le surgen dudas en relaci贸n a c贸mo revitalizar las herramientas para una colaboraci贸n, dado que en estos tiempos tan obscenos donde campan a sus anchas tribus que dictan normas en beneficio propio pero «por un bien supremo», nos encontramos al borde de ser arrastrados a una cueva sin que ni siquiera podamos acercarnos a un fuego que nos confunda, mientras el viejo griego ha mutado a un sin techo. Hablan tambi茅n Ayaso y Crespo de la solidaridad y el apoyo mutuo en pos de una «mayor cohesi贸n social y una sensaci贸n de pertenencia» y en esa l铆nea recuerdo la reflexi贸n del italiano Marco Marchioni, un viejo marxista y veterano en el trabajo social, que en Planificaci贸n social y organizaci贸n de la comunidad (1989) hablaba de aquellos que a煤n manten铆an «la utop铆a de una sociedad m谩s justa y una sociedad diferente». Dif铆cilmente y con cierta distancia del discurso del transalpino, c贸mo se podr铆a encajar la hip贸tesis que se expone para la discusi贸n cuando somos pasto de una mezcla de indolencia o sentimientos de culpa por el pasado ‘cruel’ originado en la vieja Europa. ¿C贸mo encajar a quienes 煤nicamente tienen como gu铆a un mantra en el que ‘los otros’ son simplemente infieles. De qu茅 manera se puede reflexionar pensando en Lamarck, Darwin o John Rawls, ante un panorama donde los de aqu铆 aplauden, cuando no justifican, lo que hace medio siglo era pura barbarie?

   Este ensayo que firman Jos茅 Mar铆a Ayaso y David Crespo estructurado en treinta y seis cap铆tulos y que huye de caer en la trampa del texto alambicado, merece todo el apoyo, porque pensar es un trabajo de alto riesgo en la ayer cuna de la raz贸n, y hoy con toda la pinta de haberse convertido en un espantajo.




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